Son muchas las historias que conocemos en donde los animales nos muestran la inmensa sensibilidad que tienen ademas de un “sexto sentido”. Todos los animales, sea cual sea su especie, han de ser respetados, ese es el mensaje importante que todos debemos guardar en nuestra mente.
El protagonista de esta historia es una tierna gatita de nombre Misha. Durante toda su vida vivió en las calles de un barrio de Rusia.
Misha era adorada por todos los vecinos. Todos se encargaban de darle de comer y cuando el clima era excesivamente frío la dejaban pasar a su hogar.
Un día una de las vecinas de la zona salió a tirar la basura, escuchó un ruido extraño desde el sótano y enseguida pensó que Misha podía estar herida así que bajo a comprobar que estuviera bien. Lo que esta mujer encontró al bajar la dejó en shock…
La mujer vio una caja de cartón y a su lado estaba Misha. En el interior de esta caja estaba un bebé de no más de 12 semanas de edad.
Inmediatamente llamo a las autoridades, ellos calcularon que el niño tenía varias horas en esa caja en medio de la noche y el frió. Misha estuvo a su lado todo el tiempo tratando de calentarlo ella misma.
Si Misha no hubiera encontrado al niño y hubiera hecho ruidos para llamar la atención, probablemente no lo hubieran encontrado a tiempo y hubiera muerto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario