Según mi creencia, las personas se dividen en dos grupos cuando hablamos del descanso: las que duermen y las que tienen insomnio. Para la mayoría de nosotros cuando llega la hora de ir a la cama el sueño desaparece, y de un segundo a otro nos encontramos viendo nuestra serie favorita en Netflix seguido por un ligero desplazamiento de Facebook y husmeando un poco de ventana de compras en línea... cuando en realidad sólo queríamos dormir.
Hace unos años, científicos pusieron un nombre a este fenómeno: "procrastinación de la hora de acostarse", que se refiere a cuando se pospone dormir sin razón alguna.
En este punto, no nos sorprende que cheques tu celular antes de dormir, ya que en realidad el 95% de las personas lo hacen y aunque estudio asegura cómo la luz emitida por los dispositivos digitales afecta tu salud y puede causar ceguera temporal, nada puede eliminar las distracciones nocturnas, aunque estas cambien nuestro ritmo circadiano. Y sin embargo, por alguna razón misteriosa, la tentación de perder el tiempo es poderosa, incluso cuando nos tenemos que despertar temprano.
En un estudio publicado en el Wall Street Journal, el científico del comportamiento Dan Ariely ofreció una manera de vencer procrastinación de la hora de acostarse: recluta a alguien más para que te ayude a hacerlo.
"Un socio firme haría bien, podrías pedirle a un amigo cercano que sea tu "policía del sueño" y prometa enviarte una foto en pijama todas las noches a las 10. " Explicó Ariely.
Si piensas que el sueño es sólo otro hábito difícil de superar, lo tienes que ver como si fuera una rutina diaria de ejercicio. Una investigación asegura que es más probable mantenerse al día con un plan de entrenamiento si te comprometes a trabajar con un amigo y al parecer la hora de acostarse no es diferente - es difícil de mantener, pero más fácil si tienes a alguien checando que lo hagas
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