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lunes, 26 de febrero de 2018

Mujer muere de cáncer – Entonces su perrita se cuela al velorio y hace lo desgarrador

Bien dicen que el perro es el mejor amigo del hombre y Belinha, una tierna perrita lo ha demostrado al pasar cuatro años junto a su dueña Telma María sin haberse separado un solo momento.

Telma había adoptado a Belinha cuando solamente era una cachorrita y desde ese momento se convirtieron en mejores amigas.

Pero en ocasiones la vida no es justa para muchas personas. Desafortunadamente Telma María enfermó de cáncer y un mes después falleció.

Belinha siempre estuvo junto a su dueña en cada momento, incluso el día de su muerte.

La amistad que existe entre una persona y un perro es muy fuerte y eso lo sabe muy bien quién ha tenido un perro como mascota.
Telma María, había luchado durante un mes contra esta enfermedad, pero debido a que el cáncer se le había propagado por todo el cuerpo, no logró sobrevivir. Belinha, quien se había convertido en más que su mascota en su mejor amiga, estuvo a su lado en todo momento.

Los hijos de Thelma María consideraban a Belinha como la enfermera de su madre y su mejor medicina, ya que la ayudaba a llevar con más calma esta  terrible enfermedad.
El día que Telma murió se encontraba rodeada de todos sus familiares y claro, de su perrita.

Durante su funeral asistieron familiares y amigos, Belinha se sentó junto a su dueña, parecía entender lo que estaba sucediendo.
Mientras todos lloraban y recordaban a Telma María, su perrita hizo algo desgarrador para todos y es que esta se acercó al ataúd para cuidar de ella y no se movió de ese lugar durante todo el funeral.

Ella sólo quería estar junto a su dueña hasta el final.
Después del entierro, Belinha estaba triste y preocupada. Parecía que quería saber dónde estaba su dueña.

Por lo que la familia de Telma María decidió llevarla a su tumba para que estuviera junto a su mejor amiga.

Desde el momento en que llegó al cementerio, Belinha se soltó de la correa y corrió hacia la tumba de Telma, lo sorprendente es que nunca antes había estado ahí.

Una vez más demostraba el lazo tan fuerte que existía entre ella y Telma.
Belinha nos demuestra que el amor no es sólo cosa de personas.

Finalmente Belinha fue adoptada por, Dionisio, el hijo de Telma. Pero sin importar cuántos años pasen, esta perrita nunca olvidará el amor que siente por su  dueña y lo feliz que fue junto a ella.

Esta historia ha conmovido a muchas personas pues nos muestra que el amor que existe entre una persona y un animal, es el más puro, sincero y extremadamente fuerte.

¿Qué opinas acerca de esta historia? Si crees que no hay amor más sincero que el amor de un perrito hacia su dueño, difunde con los demás. 

Fuente:World Wide Web

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