La limpieza es uno de esas tareas siempre pendiente en una casa, y si hace poco que te has independizado, habrás empezado a valorar todo lo que hacía tu madre por ti en la casa y que no tenías ni idea. Uno de los lugares más desconocidos antes de la independencia es el baño, en lo que a limpieza requiere. ¿Tanto se ensucia un baño? ¿He producido yo toda esa suciedad con mi sola existencia?
El truco definitivo para mantener tu baño perfecto
Mantener el baño limpio, fresco y desinfectado es importante no solo para ti, sino para el bienestar de toda tu familia y ahora se convertirá en un objetivo más que asequible con este sencillo truco.
Lo mejor para mantener tu baño fresco es no usar esos productos de limpieza preparados llenos de químicos que puedes conseguir en cualquier supermercado, lo mejor es hacer tu propio limpiador de baño, solo vas a necesitar:
60 ml de zumo de limón
160 g de bicarbonato de sodio
1/2 cucharada de vinagre
1 cucharada de agua oxigenada
15-20 gotas de aceite aromático
Mezclar
Primero mezcla el bicarbonato de sodio con el zumo de limón en un bol pequeño. A la vez, pero en un bol diferente, mezcla el vinagre con el agua oxigenada. Una vez estén las dos mezclas hechas, tendrás que unirlas. Vierte el vinagre con agua oxigenada dentro de la otra mezcla, poco a poco. Una vez esté todo mezclado solo tendrás que añadir la fragancia que más te guste para darle a tu baño un olor refrescante.
El trabajo duro se acaba aquí, ahora solo queda esperar
Una vez tengas la mezcla, tienes que hacer pequeñas pelotas y dejarlas secar durante la noche envueltas en papel secante. Cuando estén todas están secas, solo tienes que guardarlas en un tarro, preferiblemente bonito, cerca del retrete. Cada vez que notes que tu baño necesita un lavado, lanza una de estas bolas a su interior, con 2 o 3 veces por semana bastará, y el baño se limpiará por arte de magia.
¿Qué te ha parecido este sencillo truco? ¿Lo conocías o seguías limpiando tu baño frotando sin cesar?
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