Todos necesitamos a nuestros padres o a una familia amorosa en la que podamos crecer felices y sentirnos seguros. Tristemente, no todos pueden ser tan afortunados y viven en hogares violentos o ni siquiera tienen un hogar ni una familia.
Así era la vida de Seth Miller, un chico que fue abandonado junto a su hermana en un orfanato.
Seth vivía con su mamá soltera, una mujer agresiva y alcohólica quien realmente no quería a los dos hermanos en su vida. Un día, simplemente los dejó a la puerta del orfanato. Ambos crecieron y aunque su hermana sí encontró un nuevo hogar, Seth se quedó y creció ahí hasta que cumplió los 18 años.
Ya no se podía quedar más tiempo, así que se vio obligado a vivir en la calle y a lavar vidrios de automóviles en el semáforo para sobrevivir. Pero su vida cambiaría cuando encontró a un rostro conocido.
Aquí te dejamos el video que cuenta completa esta increíble historia:
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