La organización de consumidores Facua ha denunciado la autorización del Gobierno a las compañías eléctricas para que cobren, en este mes de mayo y de una sola vez, las tarifas que, durante tres años, se aplicaron incorrectamente por un mal cálculo en la fijación de su parte regulada. Esta medida, según advierte Facua, puede llegar a inflar más de un 50% el recibo de la luz este mes de mayo, y que ha propiciado que las eléctricas tengan libertad para decidir si lo aplican a lo largo de varios recibos o de golpe, como está haciendo Endesa -según apunta la organización- este mes.
Facua lamenta la nula sensibilidad que han tenido tanto Gobierno como las compañías con la grave situación económica de multitud de consumidores, ya que tenían de plazo para imponer la refacturación -previo aviso a los usuarios de los motivos del reajuste- hasta el 30 de septiembre.
De hecho, y según destacan, ni siquiera se han tenido en consideración a los beneficiarios del bono social, a los que el cobro de las cantidades también se les está aplicando íntegramente. Por último, Facua ha informado de que la refacturación se aplica a los usuarios que durante todo o una parte del periodo comprendido entre abril del 2014 y diciembre del 2016 tuviesen la tarifa semirregulada PVPC.
LA VERSIÓN DE LAS ELÉCTRICAS
Endesa ha cifrado en 5,67 euros el coste total que tendrá para un consumidor tipo acogido a la tarifa regulada la refacturación que deberán acometer las eléctricas para regularizar los cobros después del cambio en la metodología que fija los márgenes de comercialización.
Las compañías tienen la posibilidad de cargar la cantidad resultante de la refacturación de una vez o en varios recibos. Según Endesa, para un consumidor tipo, con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo de 3.000 kilovatios hora al año, el coste total de la refacturación, que abarca casi tres años, será de 5,67 euros.
El impacto medio, en el caso de Endesa, sería de 2,2 euros por cliente.
LA REFORMA
En junio del año pasado, el Tribunal Supremo obligó al Gobierno a elaborar una nueva metodología para calcular el margen de comercialización de las compañías que suministran electricidad a tarifa, el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).
Ese cambio exigía refacturar a los 13 millones de consumidores acogidos a tarifa desde que entró en vigor la metodología anulada por el Supremo, en abril de 2014, hasta la puesta en marcha de la nueva.
En noviembre, el Consejo de Ministros aprobó una nueva metodología cuyo impacto el Ministerio de Energía cifró en unos 25 céntimos de euro al año. Energía calculó entonces que la refacturación supondría un coste medio de 1,76 euros por consumidor.
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