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martes, 2 de mayo de 2017

Durante su discurso de graduación dejó atónito a todo el mundo. Resultó que había pasado su vida escolar SIN TECHO..

“Renunciar nunca es una opción… Todo el mundo piensa que trato de tener buenas calificaciones porque soy inteligente. No es verdad. Lo hago porque tengo mucho que perder”. A medida que el público comienza a darse cuenta de lo que quiere decir, un silencio total se apodera de todos. Hasta este punto, todos fuera del círculo cercano de Griffin eran completamente inconscientes de su vida fuera del ámbito académico.
La madre de Griffin Furlong murió cuando tenía 6 años, dejándolo con su hermano mayor y su padre. Después de su muerte y una serie de dificultades familiares, se quedaron sin casa, pasando de hoteles a moteles y luego a refugios. Dondequiera que pudieran dormir, ahí iban.

En una entrevista, Griffin relató sus sentimientos de aislamiento a lo largo de su etapa como estudiante. Debido a que no vivía en los mismos barrios que sus compañeros, tomaría una ruta de autobús diferente hacia y desde el refugio o motel en el que se alojaba junto con su padre y hermano. Recordó muchas noches soportando hambre, deseando no tener que despertar para enfrentar otro día así.
Sus compañeros y maestros estaban asombrados, por decir lo menos. La profesora Natalie Donald dijo: “En realidad lloré cuando lo vi en las noticias. Ha hecho todo lo que debía en mi clase, y nunca usó sus circunstancias como una excusa para justificar que no podía hacer nada”.

Griffin fue aceptado para ir a la universidad del estado de Florida donde su hermano mayor debía graduarse ese verano. Una cuota de $20 mil dólares al año por matrícula y alojamiento parecía poner en peligro las futuras metas educativas del adolescente. Después de obtener un par de préstamos y becas para ayudarle a cubrir los costos, todavía le faltaban gastos por cubrir. Preocupados por su situación, sus amigos crearon una página de GoFundMe en nombre de Griffin, y en tan solo dos semanas había recaudado $90 mil dólares.

Cuando Griffin concluyó su discurso, dio un último consejo a sus compañeros de clase. “No vivas una vida sin propósito… Es increíble lo que puedes hacer con tu vida cuando tienes motivación, ambición y, lo que es más importante, un propósito.”

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