Por desgracia, no existe un régimen judicial perfecto y libre de errores. Ya hemos visto en más de una ocasión cómo, por un motivo u otro, quedan absueltas personas que debían ser castigadas. Algunos de estos casos son especialmente inexplicables y despiertan la rabia de cualquiera que tenga corazón. Una de esas situaciones tan injustas es la que está viviendo la familia Marbury, de Oregon, que ha sufrido cómo la justicia deja en libertad a la niñera que golpeó a su bebé de tan solo un año.
El blog The Blaze se hace eco de este vergonzoso suceso que Joshua, el padre del pequeño, ha denunciado a través de su cuenta de Facebook. Los hechos ocurrieron el pasado marzo, cuando Joshua y su mujer Alice tenían que acudir a una cena, motivo por el que dejaron en casa a su hijo Jacob con la niñera. Nunca habrían imaginado que al regresar encontrarían a su pequeño con el lado derecho de la cara lleno de golpes, mientras la empleada dormía tranquilamente en el sofá.
“Cumplí mi parte de acuerdo con Dios y con quienes me aconsejaron no tomarme la justicia por mi mano”, confesó Joshua en su doloroso post. Los doctores y un detective privado han confirmado que el daño causado al niño podría haber sido aún peor. Los Marbury han revelado que la canguro había confesado y reconocido sus injustificables y horribles actos. Sin embargo, tras dos eternos meses de investigación, la familia ha recibido la noticia más terrible: los cargos contra la niñera han sido retirados.
Es realmente increíble cómo la Justicia intenta argumentarse respaldando su decisión. “Dicen que esto ocurre porque mi hijo no puede confirmar verbalmente que fue agredido, ni evidenció dolor, ni se puede demostrar que esta persona lo hiciese de manera intencionada”, lamenta Joshua, tan triste como apenado. La culpa de todo esto recae sobre una extraña y desacertada ley del estado de Oregon, que complica extremadamente el seguimiento de esta clase de crímenes cuando la víctima no puede probar las agresiones.
“Tengo la esperanza de que esto se vuelva viral y se haga algo al respecto. Nadie puede golpear a un niño y salir indemne simplemente porque él no puede confirmarlo”, añade Joshua. Aún se espera que las autoridades recapaciten, mientras tanto, este padre ya ha logrado difundir su historia. Desde el pasado viernes, su denuncia en Facebook ha sido compartida por casi 400.000 usuarios de la red social. Tal vez, ese altavoz ayude a que los Marbury consigan hacerse escuchar.
Los padres respondemos por los hijos menores de edad, por tal motivo, creo que deben defender a su bebé de las agresiones causadas por esa loca.
ResponderEliminarEn cuanto la vean, arrastrenla de las greñas por toda la avenida, y recuerdenle que a un bebé se le cuida y protege, no se le maltrata.
Pónganse una máscara y nieguenlo todo.