No es un secreto que los gatos madres y sus gatitos comparten un vínculo muy especial. Todos sabemos que un gatito recién nacido está ciego y no puede ver hasta unos pocos días después del nacimiento, por lo que su madre invierte todo su tiempo lamiendo, acariciando y orientándolos. Hasta que los gatitos tienen 3 semanas de edad, la madre no sólo cuida de ellos, sino también les enseña a caminar y explorar nuevos horizontes fuera del nido. Como cualquier otro padre, la madre gato le muestra a su descendencia cómo funciona este mundo y lo que hay que hacer para sobrevivir en él. Sin embargo, la señora de este video va mucho más allá del cuidado de sus propios hijos y adopta un pequeño conejo bebé cuya madre murió cuando tenía una semana. La gatita no hace diferencias entre sus propios bebés y el pequeñito adoptado, a todos les brinda los mismos cuidados.
Bueno, ¿qué más hay que decir? El corazón de madre no conoce límites cuando se trata del cuidado de los bebés, incluso si son de diferente color, religión o incluso de una especie diferente.
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