Del bautizo de Bembibre a la boda de Ponferrada, la ‘banda del simpa’ habría disfrutado de varios banquetes por el Bierzo sin pagar un duro. Según la reconstrucción efectuada por los camareros y propietarios de los locales afectados, se trataría de un nutrido grupo de rumanos de etnia gitana que conducen coches de alta gama y que en algún momento decidió no pagar por sus fiestas familiares. La policía sigue ahora su pista gracias a las grabaciones y fotografías que ellos mismos subieron a las redes sociales.
La propietaria del hotel restaurante El Carmen, donde dieron su último ‘palo’, confirma por teléfono que eran por lo menos 120 personas y que el desfalco superó los 2.000 euros. Se escaparon justo antes de que les sirvieran el postre, haciendo una conga hacia el exterior del local, donde los camareros observaron, atónitos, cómo se subían a toda prisa en sus coches y salían derrapando.
La Guardia Civil asegura que ya dispone de algunas pistas sobre su posible paradero, aunque en realidad ellos nunca tomaron demasiadas precauciones para ocultarse. Al parecer, algunos viven en la zona y el resto de invitados podrían ser parientes o amigos llegados de otros puntos de España. La propietaria de El Rincón de Pepín, en Ponferrada, los localizó por Facebook a principios de febrero para recordarles que se habían ido sin pagar la cuenta de una boda con 200 invitados y en la que dejaron a deber entre 10.000 y 15.000 euros.
El jefe de sala de El Rincón de Pepín se llama John y también es rumano. "Me da especial rabia que sean paisanos míos", dice, confirmando la nacionalidad de los presuntos delincuentes. En el Bierzo hay una nutrida comunidad extranjera, con comunidades de Cabo Verde, Pakistán y Rumanía bien asentadas e integradas con la población local.
“Reservaron para 100 personas, pero se presentaron cerca de 200. Justo después de los postres, se dieron a la fuga. Salí a hacer dos cafés y a la vuelta no había ni dios”, comenta. Del resto de la velada recuerda que transcurrió de manera normal, sin grandes sobresaltos, más allá del baile al ritmo de una orquesta con canciones típicas. El enlace era el de una pareja joven, de unos 18 años, a quienes los invitados dejaron cerca de 40.000 euros de regalo de bodas directamente en la mesa nupcial, como marca su tradición.
Fue en un pispás, no sabemos cómo pudo pasar, creemos que estuvieron vigilando nuestros movimientos todo el tiempo
El menú, pactado de antemano, consistió en fiambre variado de entremeses, merluza rebozada, chuletas de cerdo y una tarta de tres pisos, regada con abundantes cantidades de whisky que encargaron para la ocasión. El vino no lo tocaron, pero dieron cuenta de toda la comida. Por estos menús, que rondaban los 50 euros, no pagaron más que el adelanto. Al parecer, son ellos mismos los que proponen pagar una señal para generar confianza.
“Fue en un pispás. Aprovecharon justo un momento en el que no estábamos ninguno, no sabemos cómo pudo pasar. Creemos que estuvieron vigilando nuestros movimientos todo el tiempo”, asegura el encargado. Durante la ceremonia les hizo de intérprete, aunque cambiaban al gitano cuando no querían que se enterase de lo que hablaban.
En El Rincón de Pepín alcanzaron a apuntar algunos números de matrículas y les han podido encontrar en Facebook con los nombres con los que hicieron la reserva. A pesar de que hicieron una denuncia, aseguran, aún no han recibido noticias de la Guardia Civil.
Robando la vajilla
A raíz de la publicación y el eco mediático del 'simpa' de Bembibre, la prensa de la región (diarios como 'Infobierzo' o 'Bembimbre Digital') ha descubierto que no se trata de un hecho aislado. El hotel restaurante Novo de Ponferrada fue quizás el primero en recibir la visita. Fue hace cosa de un año. “Un grupo de seis u ocho personas, todos gitanos rumanos, vino al hotel a alquilar uno de nuestros anexos de 400 metros cuadrados. Solo el espacio, ellos traían la comida y la bebida. Les obligué a pagar por adelantado y aceptaron”, recuerda Juan González, gerente del hotel.
Hasta ahí todo bien. Los problemas llegaron el día de la celebración. “Habíamos pactado que, a partir de 80 personas, habría un cargo de 10 euros por persona extra. Se presentaron ciento y largo. Hicieron su celebración con mucho jaleo y banda de música al final, pero el problema vino cuando los veo que están metiendo toda la vajilla y la cubertería en sus furgonetas. Tuve que salir corriendo a parar aquello. Me decían que es que se lo llevaban para terminarse la comida que había sobrado. Al final conseguí que me devolvieran la vajilla, pero no pude hacerles pagar los 10 euros por persona extra”.
Aparecían a veces en coches de alta gama, recuerdo un BMW X6, y a veces en furgonetas
Con ese precedente, González le puso una cruz a ese pintoresco grupo de gente, muchos de los cuales “están cada día vendiendo pañuelos en los semáforos o pidiendo en la puerta de los supermercados”. Aunque ellos, contentos al parecer con su fiesta en el hotel Novo, trataron varias veces de convencer a González de que les alquilase una sala. “Pero esta vez querían ya un salón bien vestido y que les sirviéramos comida. No me fiaba nada y les pedí el importe íntegro por adelantado, 3.000 euros, más otros 3.000 de fianza. Se marchaban y volvían al cabo del tiempo a intentarlo otra vez. Aparecían a veces en coches de alta gama, recuerdo un BMW X6, y a veces en furgonetas. Se te plantaban una docena de personas para meterte presión”.
La última intentona del grupo en el hotel Novo tenía como fecha este pasado lunes 27 de febrero. Casualmente el mismo día en que la ‘banda del simpa’ estafó al hotel El Carmen de Bembibre. “Estoy seguro de que son los mismos. Un banquete normal se suele celebrar en fin de semana, pero estos siempre querían alquilar en días entre semana. Cuando vi que habían estafado a El Carmen con un bautizo el lunes, me dije: tienen que ser estos”, conjetura González. “Después de que ocurriera, llamé a los dueños, porque me molestó muchísimo que les hicieran eso. Que te estafen varios miles de euros es un problema muy grande para un hostelero de esta región”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario