Parece que Júpiter es medio masoquista.
El 17 de marzo, el gigante gaseoso fue aporreado por una roca espacial que viajaba a toda velocidad, y observadores aficionados casualmente captaron la violencia cósmica al momento del impacto.
Se trata del último avistamiento en una serie de impactos observados en Júpiter: astrónomos aficionados capturaron incidentes parecidos en 2009, 2010, y 2012. Antes de la embestida reciente, se pensaba que los impactos en Júpiter eran raros, tomando como espectacular excepción el bombardeo masivo de Shoemaker-Levy 9 en 1994.
Sin embargo, el consenso más reciente es que Júpiter podría ser un escudo que protege la Tierra, absorbiendo las rocas espaciales antes que lleguen a nosotros; o quizás actúa como honda, devorando algunos impactos, pero también apartando cometas y asteroides de nuestro camino, tal vez incluso los que podrían haber transportado los ingredientes de la vida hasta nuestro mundo.
Por casualidad, dos astrónomos aficionados de Austria e Irlanda captaron en video, de manera independiente, la última colisión, y descubrieron el incidente apenas esta semana después de revisar sus grabaciones. En las imágenes, el impacto aparece como un destello de luz en el borde de la cara redonda del planeta.
El astrónomo aficionado Gerrit Kernbauer captó estas escenas de una roca espacial golpeando a Júpiter, el 17 de marzo.
No se sabe si el impactador era un meteoro o cometa descarriado que fue succionado por la atracción gravitacional del enorme planeta. Fuera lo que fuese, el astrónomo Phil Plait escribe que, a juzgar por el tamaño visible de la explosión, calcula que el objeto no medía más de unas pocas decenas de metros de diámetro.
Grandes instrumentos, como el Telescopio Espacial Hubble, podrían ser de utilidad para profundizar la investigación si los astrónomos descubren que quedó una mancha oscura en la cubierta nubosa de Júpiter: signo del hollín producido cuando la atmósfera se súper calentó durante la explosión. Pero hasta ahora, no se ha informado de semejante residuo.
¿Escudo contra impactos o fuente?
Mientras los astrónomos empiezan a pensar que los impactos jupiterinos son bastante comunes, aún quedan interrogantes sobre la teoría popular de que Júpiter es el protector de la Tierra, encargado de acabar con asteroides y cometas potencialmente peligrosos antes que puedan alcanzarnos.
Un nuevo estudio, publicado en febrero en la revista Astrobiology, sugiere incluso que podría estar ocurriendo todo lo contrario. Modelos computarizados han demostrado que, aunque Júpiter podría tragarse algunos objetos, conjuntamente con Saturno, los dos gigantes gaseosos también podrían empujar cometas y asteroides al sistema solar interior, enviando algunos de ellos hacia la órbita terrestre.
El irlandés John McKeon también capturó imágenes de un objeto brillante cerca de la superficie de Júpiter.
Al mismo tiempo, las simulaciones demuestran también que los compuestos orgánicos importantes para el desarrollo de la vida podrían haber llegado a la Tierra, hace miles de millones de años, en rocas espaciales que los dos planetas gigantes enviaron hacia aquí.
Lee: ¿La tierra es tan especial como creemos?
Mira por ti mismo
Para observar este tipo de impactos necesitas un telescopio grande equipado con una cámara digital, por no hablar de un montón de suerte. No obstante, es fácil detectar a Júpiter en el cielo a simple vista. El gigante gaseoso es visible como una estrella brillante de color cremoso, incluso en el cielo de ciudades con mucha iluminación artificial.
La próxima noche clara, busca al planeta más grande del sistema solar saliendo por el oeste, justo después de la puesta del sol. Al avanzar la noche, el planeta súper brillante se desplazará por el cielo en las horas de oscuridad y se pondrá en el oeste, al amanecer. Enfoca el planeta con tu telescopio, aunque sea pequeño, y podrás ver los distintivos cinturones de nubes que cubren su región ecuatorial, con las cuatro lunas más grandes alineadas a su lado.
¡Cielos despejados!
No hay comentarios:
Publicar un comentario