En Tailandia, una mujer se encontraba en casa haciendo sus quehaceres habituales, cuando escuchó unos sonidos raros que provenían de la arboleda. Al principio ella no les concedió ninguna importancia, pero cuando estos se hicieron más fuertes, decidió ir a investigar. Jamás pensó que lo que lo que encontraría ahí sería algo tan espantoso.
Lo primero que notó al aproximarse hasta un árbol, fue que había algo muy extraño en el suelo…
Parecía como si algo hubiera sido enterrado y todavía se encontrara vivo. Al mirar con atención, se dio cuenta de que era un pie.
Rápidamente se agachó para cavar, consiguiendo sacar a un bebé que no solo había sido enterrado, sino que también mostraba signos de haber sido herido con un arma blanca. De inmediato dio aviso a las autoridades.
El pequeño fue rápidamente trasladado al hospital para recibir atención médica. Nadie podía creer que alguien fuera capaz de lastimar así a una criatura.
Aunque no se esclareció este crimen, por suerte el bebé pudo ser dado en adopción a una familia que cuida muy bien de él.
En poco tiempo se había restablecido y ahora está a salvo con gente que lo ama. Es inconcebible la maldad de la que pueden ser capaces algunas personas, pero por suerte, son más las que están dispuestas a hacer lo correcto.
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