Un hombre de Ferrol ha sido condenado a prisión por abusar de su propia hija, unos abusos que comenzaron cuando la menor tenía 6 años. Lejos de ofrecer alguna defensa o alegar problemas psicológicos, el condenado ha justificado los abusos declarando que «ella se vestía como una guarrilla y se acostaba con todo el mundo, hasta con su hermano». Los miembros de la sala no daban crédito cuando el padre ha apuntado que «no era capaz de educarla ni castigándola encerrada en su habitación cuatro horas en bragas y sujetador un día de frío». Los abusos comenzaron con seis años, pero a los 12, según el padre «me dijo que quería más y empezaron los actos sexuales completos».
Por estos hechos y por tenencia de material pornográfico de menores, el hombre se enfrenta a 16 años de prisión y una indemnización de 50.000 euros para la víctima. Sin embargo, su hija no fue la única víctima de este hombre de Ferrol, ya que una amiga de su hija ha interpuesto una denuncia.
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